sábado, 3 de septiembre de 2011

Hoy sábado: te damos matraca!

Clic en las imágenes para ver en grande:

Leemos: Almada - Brignardello - Correa - Eleisegui

Nos siguen con el sonido: Dos Cachivaches

¿Dónde? Bar El Cisne. Bulnes 298 (esquina Potosí). Capital Federal, más vale

¿A qué hora? Después de las 22 horas, máquina

Acordate que es gratis



jueves, 7 de abril de 2011

tara tara tararararara

Nací para ti, aquí me tienes Qué te hace feliz, dime que quieres Te esperé, en soledad tanto tiempo que me estás dando la vida si sientes tú lo que yo siento. Juntos los dos, es como un sueño donde el amor encendió nuestra luna gris. introducirse: http://www.youtube.com/watch?v=WEVjzPo4-mI

sábado, 19 de marzo de 2011

Poema

Estoy sentado en el balcón
mirando un avión
tomo vino
lo compré en el chino
Alguien entró y se fue
escucho vox dei

Fragmento de poema extraído de la hemorroide viceral de un poeta con diarrea.

viernes, 18 de marzo de 2011

Chupala puto

Los primero sonidos articulados sirvieron para comunicar las ideas y llamar al objeto sexual. El desarrollo ulterior de las raíces de la lengua acompañó la organización del trabajo en la humanidad primitiva. Los trabajos eran efectuados en común y con el acompañamiento de expresiones orales rítmicamente repetidas, resultando así un desplazamiento del interés sexual sobre el trabajo. Diríase que el hombre primitivo no se resignó al trabajo sino haciéndolo equivalente y sustitutivo de la actividad sexual. De este modo, la palabra lanzada durante el trabajo en común tenía dos sentidos, uno que expresaba el acto sexual y otro el trabajo activo que era asimilado a dicho acto. Poco a poco, la palabra se desligó de su significación sexual para enlazarse definitivamente al trabo. Análogamente sucedió en generaciones ulteriores, las cuales, después de inventar nuevas palabras de significación sexual, las aplicaron a nuevos géneros de trabajo. En esta forma se habrían constituido numerosas raíces, que todas tuvieron un origen sexual, pero perdieron luego su significación primitiva.

Segismundo Froilán.

miércoles, 9 de marzo de 2011

La necesidad hace del hombre una máquina corrupta porque la culpa es tan gaseosa como un pedo de soda. Por supuesto que apenas si cumplimos una ínfima parte de los deseos que tenemos. Así están dadas las cosas. En definitiva no hacemos otra cosa que frustrarnos cada día. Yo, por ejemplo, si me traigo una mina a casa, capaz que después de acabar tengo ganas de descuartizarla. Pero más bien que no lo hago; le convido un pucho y espero que se me llenen los huevos para ensartarla otra vez.

A veces, esperando que cambie el semáforo, veo pasar unas borregas, y me nacen desde adentro unas ganas tremendas de desfigurarlas. Pero no, me quedo en el molde y saco el Ford arando, cosa de alejarme lo más rápido posible de ellas, ya que mis pensamientos vienen conmigo, y por más fuerza que haga, siempre están ahí, para pudrirme la sesera.

Forfalcon.

martes, 8 de marzo de 2011

"La humanidad se perdió un genocida" (Entrevista a Garófalo)

El tipo es un psicópata. El problema no es que lo sea, sino que no lo concrete. ¿A qué me refiero con “no lo concrete”? Al hecho de matar a alguien ¿qué sino? Más allá de que es una bestia siempre transpirada, con Falcon nos hermana la sensación de poder haber sido asesinos perfectos. Él y yo somos la clase de gente que puede poner una bomba en la Rosada. Y no morir en el intento. Que la gente joda con Bin Laden o, no sé, Aldo Rico disfrazado de carapintada, parte del hecho de que nosotros nos dedicamos a otra cosa. Sino, creéme que todos hablarían de Ford Falcon y Garófalo. ¿Puedo cortar acá, flaco? ¿Esto sale tal cual o lo editan? Pero sí, antes de irme, te aseguro que el tipo es un psicópata. ¿Vos escuchaste cómo piensa? ¿El nivel de entuerto al que puede llegar? No sé si está bien que se haya dedicado a toda esa pavada de los autos. La humanidad se perdió un genocida. No es poca cosa.

miércoles, 19 de enero de 2011

Chorizo de letras


Sí. Tarde pero seguro. Como buena parte de la mafia china sabe, Fiestorros cerró el 2010 con una soberana mezcla de choripan y lectura dentro de las torres escarpadas de El Arte de Fluir.

A continuación, un breve repaso fotográfico de lo que fue una velada que arrancó en la terraza y terminó en la profundidad visceral del mutante centro cultural.

Empezamos por arriba: sí, ese que ven es Juan Marcos Almada. Semi tapado, y dueño del eterno dedo que señala, Mr. Hernán Brignardello.

Juan Marcos Almada se hace de chapa y muta en un Falcon. Ford Falcon, secundado por la balacera sonora de Dos Cachivaches:


Almada y su tribuna: va camino al gol.


Toda la potencia escénica de Hernán Brignardello para dar vida a su creación más espeluznante: El Tararira:


El seleccionado reunido: Almada, Brignardello, Correa, Eleisegui y Guerrieri (Fiestorros, o sea) + Dos Cachivaches:


Otra de Hernán Brignardello:


Este es Patricio Eleisegui. En la imagen, preparándose para despegar con un texto al que no le sobra sangre:


Marcelo Guerrieri, justo abajo. Levanta los puños y esconde el mentón. Amaga, quiebra la cintura y suelta el latigazo de derecha. Es el cacique:


Cómo habrá sido la jarana, que hasta los Fiestorros se tomaron el atrevimiento de contar con un presentador. En la imagen, el también escritor Juan Carlos Virgilio:


Marche un corazón. Nicolás Correa se despliega y la noche se hace latido. Abajo, desentrañando sentimientos:


Otra de la banda:


Dos Cachivaches enciende tu fuego. Imaginación y pulso musical para completar el frasco venenoso en el que descansa Fiestorros:


Después está el público. Los amigos. Los colados. Los que quieren ser parte. Cada vez más. La puerta es grande: aprovechen.


¿Venís al próximo?